Septiembre 2021
CircularSeas ha cerrado la 5ª etapa del proyecto con la definición de los casos de estudio y los ojos puestos en el desarrollo definitivo del sistema integral para el diseño e impresión en 3D y su aplicación en las pruebas piloto.
Circularseas, proyecto cofinanciado por el programa Interreg Atlantic Area a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), tiene como objetivo convertir los residuos plásticos en productos sostenibles para las industrias marítimas. Quiere promover la Economía verde en el Espacio Atlántico, como un medio para adaptar y diversificar las actividades económicas y reducir el impacto ambiental en el océano. El objetivo general es, por lo tanto, promover el desarrollo de productos, piezas y componentes econinnovadores o ecológicos por parte de las industrias marítimas que utilicen plástico reciclado y tecnología de impresión 3D.
El proyecto entre otras actividades tenía dos hitos reseñables que han llegado a su fin en esta 5ª etapa, como son el diagnóstico de la situación de la recolección del residuo plástico de los puertos y sus actividades en los 6 nodos de trabajo, además de la definición de los casos de estudio para dar utilidad a ese residuo plástico mediante tecnologías 3D.
En esa línea, en Cork (Irlanda) el caso de estudio se ha centrado en la conversión de las redes de nylon en piezas de repuesto como cojinetes y ruedas de rodillo. El nodo de La Rochelle (Francia) fija sus esfuerzos en la producción de equipos deportivos como quillas de surf partiendo de plásticos procedentes del sector del cultivo de ostras. El nodo de Vigo ha centrado su trabajo en embarcaciones marítimas y la introducción de una impresora 3D a bordo para tener acceso a piezas de repuesto sin la necesidad de almacenarlas en la embarcación. En Peniche (Portugal) se han centrado en los moldes de termoplástico y su adecuación a los plásticos reciclados de residuos plásticos del mar.
El nodo de Ondarroa, en el que Leartiker y Azaro Fundazioa están trabajando con diferentes entidades locales, se ha priorizado cerrar el circulo de redes de poliamida desechadas utilizando ese residuo en la fabricación de etiquetas que diferencian el bonito del norte. Al proyecto además se le ha añadido una vertiente donde se propone la experimentación con materia biodegradable con el objetivo de evitar residuo plástico contaminante en los océanos.
Desde el nodo de Ondarroa además, en esta 5ª etapa se ha participado en el workshop internacional relacionado con la definición de los casos de estudio que serán la base para el desarrollo de la pruebas piloto de la siguiente fase.
El proyecto está entrando en su último año donde los esfuerzos se centrarán en el desarrollo de los materiales reciclados y del sistema integrado para facilitar el diseño y la fabricación de las piezas en 3D, todo ello para aplicarlo en las pruebas piloto.